La parálisis cerebral es un grupo de trastornos del desarrollo del movimiento y la postura, causantes de limitación de la actividad, que son atribuidos a una agresión no progresiva sobre un cerebro en desarrollo en la época fetal o primeros años.
Es la principal causa de discapacidad en la infancia.
El trastorno motor de la PC con frecuencia se acompaña de trastornos sensoriales, cognitivos, de la comunicación, alteraciones de la conducta, epilepsia y secundariamente alteraciones músculo-esqueléticas.
Tradicionalmente las únicas causas estudiadas eran aquellas que tenían relación con el parto, pero en los últimos años se dirige la atención con especial interés hacia las anomalías genéticas, alteraciones en el crecimiento intrauterino, infecciones, malformaciones cerebrales y complicaciones de la prematuridad. Desde finales de los años ochenta se resta valor a la asfixia perinatal como origen de la PC y se considera que supone menos del 10% de los casos.
Causas de la PCI
Prenatales:
- Malformaciones SNC
- Infecciones intrauterinas
- Accidentes cerebro vasculares intrauterinos
- Alteraciones genéticas
Perinatales:
- Hipoxia- isquemia
- ACV perinatal
- Infecciones
Postnatales
- Infecciones
- Traumatismos
- ACV
Mientras que la prematuridad y la morbilidad relacionada con el peso extremadamente bajo al nacer ocupan un lugar predominante en el mundo desarrollado, las infecciones congénitas, la encefalopatía hipóxico isquémica y la hiperbilirrubinemia postnatal siguen siendo frecuentes en países en vías de desarrollo.
Diagnóstico de la PCI
El diagnóstico se realiza por medio de neuroimágenes como Resonancia magnética y ECO cerebral y por medio de un exhaustivo diagnóstico clínico, donde se pueden evidenciar:
Alteración del tono y reflejos
Alteración de la calidad de los patrones de movimiento (repertorio motor)
Retraso en las adquisiciones
Según la semiología del trastorno motor y la distribución de la afectación Existen tres síndromes predominantes: espástico, discinético y atáxico.
PC espástica: es la forma más común (70- 80%) y el signo dominante es la espasticidad de predominio distal, definida como una elevación del tono muscular que se evidencia por un incremento como la resistencia al estiramiento muscular, que es velocidad dependiente.
PC discinética: supone el 10-15% de todas las PC y es secundaria a una afectación del sistema extrapiramidal, ganglios basales. Aunque puede producirse por cualquier causa, suele ser secundaria a una hipoxia isquemia grave. Clínicamente suele haber un período libre de síntomas de entre 5-12 meses, salvo una hipotonía axial, y un desarrollo clínico posterior hasta los 2 años. Suele haber una alteración del tono y de la postura asociada a movimientos involuntarios estereotipados y recurrentes.
PC atáxica: representan aproximadamente alrededor del 4% de las PC. Presentan hipotonía en el lactante y retraso en el desarrollo psicomotor, apareciendo posteriormente inestabilidad en bipedestación e incluso en sedestación, alteración de la coordinación y del control fino de los movimientos.
Es por todo esto que la evaluación clínica es primordial para ver a qué tipo de PC nos estamos enfrentando y comenzar con una terapia multidisciplinar lo antes posible.